Los Conejos - Mora

Sin medidas COVID, carta física no digital. Camareros con mascarillas bajadas y so lo se la suben si se lo pides, pero a la que se da la vuelta o mientras se acercan la llevan bajada. Las calidades justitas: las croquetas, la ración de mayor tamaño sin relleno, todo masa. Las demás raciones correctas pero justas en cantidad. Los postres muy flojos: El de chocolate pesado. La torrija, desde luego única pero no para volver a pedirla. La tarta de queso se notaba casara pero era bastante pesada. Una decepción.

Adjunto factura de lo que comimos y simplemente que cada uno opine lo que quiera. Por cierto las gambas estaban bastante buenas y lo demás se puede tomar en cualquier bar de la zona. Y por cierto no nos pusieron el Juve Camps que pone en la factura.

Deberíamos de acostumbrarnos y en la hostelería por su puesto también que quien se equivoca debe asumir responsabilidades o al menos no pasarse de listo y actuar con buenas artes. El caso es muy simple y no por ello llamativo, si alguien pide 1/5 de cerveza en botellín y le traen 1/3 en botellín, por equívocacion y encima el camarer@ se compromete a cobrar lo pedido es decir 1/5 de cerveza, si luego no lo cumple , demuestra en esta simpleza lo poco que importa en la mayoría de los casos un cliente.Quién manda? Ambos, uno por decidir lo que pone y lo que cobra...y el otro en decidir dónde se tomará las cervezas que realmente deseé

Buena cena, tanto en calidad de los platos como en la atención de la camarera. Pedimos dos tostas de queso de Cabra y una de salmón, y una ración de tempura de verduras con miel para picar entre todos, y la verdad es que quedamos muy satisfechos. El precio de la cena fueron 31€ (tres tostas, la ración y tres bebidas). Muy bien, repetiremos si se da la ocasión.

Comimos en el buffet. Había bandejas vacías que ya da impresión de que las camareras no están atentas a si falta algo. Tuvimos que ir detrás a decirles si pensaban reponer toda la comida que faltaba y se quedaron un poco dubitativas...repusieron pero con huevos fritos. Variedad de buena comida ninguna, había san jacobos mini como si se tratase de dar de comer a niños con comida rápida y de poca calidad para llenar estómagos. De segundo, o trucha o cinta de lomo, el lomo acuoso acompañado de patatas deshechas prácticamente como si fueran las de un hervido. Horrible. Nos fuimos insatisfechos no, lo siguiente.